Cinco personajes en busca del escenario

Por: María Jaramillo.

 

A veces los escritores dejan atrás lo que a muchos de sus lectores les gusta. Mauricio cree ser mejor en narrativa. Algunos fragmentos de sus poemas muestran para mi criterio madurez y fuerza. Tomo como una fortaleza su capacidad para contar y la considero una ventaja en el camino difícil de hacer poesía. Me sorprendió verlo como dirige su Circuito literario Bitácora, en la Estrella. Por lo regular se habla de taller de literatura o de lectura. Sentados en círculo, alrededor de una mesa donde se destaca la luz de una vela, en un espacio reducido y tal vez destinado a cumplir con diferentes usos; todos los integrantes se dan a la tarea de orientar al amigo. Sobresalen, la camaradería, la ilusión, el sueño deaprender a ser brujos. Estar allí me remontó a los orígenes, cuando a través de  un poema se invocaba a los dioses, o se buscaba adivinar el destino. Aunque vive en Envigado, Mauricio,  también es asesor cultural de la Biblioteca de La Estrella. Fue fundador del taller literario Kirame yu, segundo taller en Colombia según la biblioteca Luis ángel Arango. Docente en Literatura de la Universidad educativa San Marcos y en el Rudolf Steiner y ganador del Concurso de cuento Ciro Mendía con su texto Evangelio.

 

Carlos Mario Díaz

Nació poeta, lo conocimos en Sabaneta donde vivió varios años. La respuesta del público en sus presentaciones era total. El municipio además de disfrutar de sus lecturas reconocía en él la talla heredada de Leonor Díaz Montoya, poeta sabaneteña, de la cual desciende. Carlos Mario, está rodeado de vivencias conmovedoras ya desaparecidas en el entorno nuestro y  características de las historias del pueblo: Luz Marina Ledesma, la señorita que le enseñó a leer en la escuela de Fredonia, su pueblo natal. El título deMaestro, que le confirió la normal Mariano Ospina Rodríguez. El primero y segundo lugar en el Concurso de novela y cuento de su colegio. Los poemas como La caseteja, escritos de corazón para narrar la historia de su familia y dejar en claro los reconocimientos y la nostalgia de su tejar “La gruta del Zancudo”. Más adelante, sus estudios de Filosofía con los Misioneros Javerianos lo preparan para seguir en la ruta de la escritura. Sus letras han sido publicadas en varios medios escritos; menciono el diario El faro de Vigo en España y El Colombiano. Sus libros son el fruto de una decisión tomada como adulto, pero ya definida desde su niñez.

Wayra Torres

Cuando hablamos con Wayra la primera vez, reconocimos en su voz y expresión las cualidades histriónicas que la acompañan. Wayra, piensa que la obra se defiende sola en el escenario, tal vez por eso lleva en el dejo de su voz, el tono de presentación que después  hace visible en sus presentaciones. La niña de nueve años que ha quedado atrás, enseñó a los adultos lo que se puede hacer cuando el estímulo le da salida a las dotes. Reir llorando, sonó para ella y para los asistentes como la prueba que la acreditó para reemplazar a su prima. Imitarla fue el reto que la hizo declamadora, hoy va más allá, le dedica buena parte de la vida al  arte escénico para alimentar su proyecto, La mama Quiya, donde incluye el teatro, la danza, la poesía, el canto y la declamación. Por fuera de la academia, Wayra se construye haciendo, investigando, leyendo y aprovechando la experiencia laboral. Ha trabajado en Las Secretarias de cultura de Itagüí, donde reside; de Medellín, de La Estrella y en Ecuador. En Prometeo se desempeñó como Formadora de creación literaria. Al final…, ya por la noche, Wayra sigue soñando; es la hora de su trabajo artesanal hecho con materiales reciclables. Confecciona los accesorios que lleva en sus presentaciones.

José María Ruiz

El poeta de las “Siete en punto”. Promotor del arte poético y literario en Sabaneta, vivió la experiencia de dejar lo suyo para darle el protagonismo a los demás. Editor del boletín de poesía, Lunes 7 en punto y miembro del taller literario de La Casa de la Cultura La Barquereña, era y es, rígido en cumplir los horarios. De él y de su amigo Felipe Aristizábal, el director de dicho taller, aproveché los conocimientos y recibí la orientación que me hacía falta para empezar el camino. Miembro de la Corporación de Arte y Poesía en la calle, puso al servicio de esa organización sus conocimientos, capacidades y empeño. Los resultados obtenidos en esa época hablan por sí solos de lo que es capaz. Poeta y cuentista inédito, ganó el premio Los Sueños de Luciano Pulgar, en las dos disciplinas. Su vida que se inicia en el municipio de Caldas transcurre ahora entre Sabaneta y Arboletes, donde puede darle rienda suelta a su creatividad y a sus principios.

Fernando Jaime Araque

Desde que me tocó presentarlo en Mayorca lo tomé en cuenta. Fue una experiencia que me encaminó y me dio la satisfacción de conocer a varios artistas. Ahora con Gotas Poéticas, me dedico a lo que me gusta: promover el arte y brindarle una oportunidad más al artista de mostrar lo que hace. Este año vamos a realizar un cambio en el formato de presentación de los escritores. Los recitales van ser el objetivo. Cuando tuve la idea volvieron  a la mente los tiempos de integración y aprendizaje, las primeras impresiones al escuchar la poesía escrita por otros. Los cuatro personajes a quienes ya presenté, fueron y son, en alguna medida, parte de este apetito por el arte. Fernando Jaime, es el quinto, vive en Sabaneta y nació en Cocorná. Ha perdurado en mis recuerdos por una sola razón, sus poemas. Tienen el valor de ser tan nuestros como el sabor a patria pero pueden trascender las fronteras. Tal vez su imagen está dibujada para mí al lado de una ventana de pueblo. Las ventanas viejas, fue el primer poema  que leyó el día de esa presentación que recuerdo. Licenciado en Administración Educativa de la Universidad de Medellín, ha publicado varios libros de cuento y poesía. En estos dos géneros, ha sido finalista: En el Concurso Departamental de Poesía y en el de cuento, Argemiro Pérez Patiño,respectivamente. Ocupo el primer lugar en el Concurso de literatura Efe Gómez.